
Letra Ave María
Perdida mi alma
Ave María
Virgen del cielo
soberana de gracia
madre mía
escucha te ruego
mi ferviente plegaria
no le niegues
a este pobre corazón paz en su dolor
recurre a ti y llena de fe se arrodilla a tus pies te invoca y te ruega que le concedas la gracia que solo tu puedes dar Ave María | Ave María Virgen del cielo soberana de gracia madre mía escucha te ruego mi ferviente plegaria no le niegues a este pobre corazón paz en su dolor Perdida mi alma recurre a ti y llena de fe se arrodilla a tus pies Te invoca y te ruega que le concedas la gracia que solo tu puedes dar Ave María |
Nota personal
Por razones personales, la Virgen del Carmen es algo muy especial para mi. Nunca dejo de acudir en este día tan especial a Puerto de la Cruz. Compartir el momento con miles de personas, es un estado anímico que me embriaga, mis sentidos se abren a un sin fin de sensaciones.
Cuando Chago Melián, canta el Ave María, un nudo aparece desde mi estomago hasta la garganta, quedo sin habla, dejo de ser un vulgar ser humano y me convierto en un ser sensible lleno de emociones.
Mis sentidos, embriagados de tanta emoción, es como una recarga de energía en todo mi cuerpo. Algo tiene el Día del Carmen en el Puerto de la Cruz, es mágico y quiero invitarte a compartir este día, compartir contigo este estado emocional del que te hablo, pues te prometo que nunca lo olvidarás.
Por razones personales, la Virgen del Carmen es algo muy especial para mi. Nunca dejo de acudir en este día tan especial a Puerto de la Cruz. Compartir el momento con miles de personas, es un estado anímico que me embriaga, mis sentidos se abren a un sin fin de sensaciones.
Cuando Chago Melián, canta el Ave María, un nudo aparece desde mi estomago hasta la garganta, quedo sin habla, dejo de ser un vulgar ser humano y me convierto en un ser sensible lleno de emociones.
Mis sentidos, embriagados de tanta emoción, es como una recarga de energía en todo mi cuerpo. Algo tiene el Día del Carmen en el Puerto de la Cruz, es mágico y quiero invitarte a compartir este día, compartir contigo este estado emocional del que te hablo, pues te prometo que nunca lo olvidarás.
Sinceramente
Luis de la Campa