El pueblo debe su nombre a un pequeño cangrejo conocido como "Jaca" (Eriphia verrucosa) que antiguamente abundaba en la zona.
El acceso al barrio se realiza a través de la Autopista del Sur por las salidas de "Tajao" (dirección norte), "Abades" (dirección sur) y un tercer acceso situado en la trasera de la gasolinera de la TF-1 que queda entre ambas salidas, la "Estación de servicio Repsol Abades" (dirección norte).
Este núcleo tiene sus raíces en un asentamiento de población proveniente principalmente de las medianías del municipio, que durante el periodo estival se desplaza hasta la costa para aprovechar los recursos que el mar proporciona.
La ensenada de La Jaca ha sido uno de los recursos naturales que han ayudado a consolidar este barrio, sirviendo de refugio del viento para los pequeños barcos de faena, sirviendo además en otras épocas como encerradero natural para apresar pescado, aprovechando las mareas.
En la actualidad se puede considerar este núcleo como un "pueblo-dormitorio" ya que es casi nula la existencia de puestos de trabajo.