
Para poder saborear los buenos quesos de la isla, primero debemos conocer a la cabra autóctona de La Palma. Sus orígenes son prehispánicos y se pueden catalogar en función de los tonos de su pelo (bermejas, negras fulas, pejeverdes, moriscas, jardinas, herreras o cardosas).
La cabra autóctona palmera
Se trata de un animal perfectamente adaptado a las condiciones climatológicas y orográficas de la isla. Son ejemplares rústicos y resistentes, con la cornamenta abierta desde el nacimiento, una cola redondeada y dirigida hacia arriba, extremidades cortas y con buenos aplomos, el tronco de costillares redondos , la cabeza triangular, la vivacidad de los ojos o las mamas globosas y de piel fina.
La historia del queso palmero comienza a escribirse con la introducción de las cabras prehispánicas por los primeros...
Posted by Tenerife Vívela on Sábado, 10 de octubre de 2015